Como todos sabemos, el mundo está repleto de oposiciones, y por
supuesto, cualquier atributo, concepto o idea serían muy difíciles de entender,
o directamente de entrar en el sistema semiótico y tener sentido, sin su
contrario. ¿O cómo definiría la belleza sin la fealdad, el día sin la noche?
El creativo Charles Thompson ha desarrollado algunas técnicas sobre como
aprovechar este modelo binario de oposiciones con el fin de aumentar nuestra
creatividad. Veamos su metodología y algunos de sus conceptos.
Lao-Tzu escribió el Tao te Ching para enfatizar la necesidad de que un
líder que intentaba ser exitoso, pudiera ver y entender las oposiciones por
todas partes. Dos conceptos formulados son especialmente importantes:
1. El líder sabio sabe cómo ser creativo. Para dirigir, el líder primero
aprende a seguir.
2. Para prosperar, el líder simplemente aprende a vivir. En ambos casos,
es la misma interacción la fuente de creatividad.
Todo comportamiento se compone de contrarios. Por eso, sería interesante
que aprendamos a ver las cosas desde atrás, dentro, fuera, y al revés.
La metodología
En orden de llevar todo esto a la práctica, se deberían tener en cuanta
los siguientes siete puntos:
1. Piense el problema al revés. Cambie una afirmación positiva por una
negativa, y viceversa. 2. Intente definir lo que no es.
3. Vea aquello que los demás no ven, para comenzar a resolverlo desde allí.
4. Utilice el método "que pasaría si…" como brújula.
5. Cambie la dirección o la ubicación de su perspectiva.
6. Piense lo que haría si está buscando el resultado opuesto
7. Torne la derrota en victoria o la victoria en derrota
Entendiendo cada punto
Vemos a que se refieren más concretamente cada uno de los puntos:
1. Cambiando la
afirmación positiva en negativa
Por ejemplo, si se encuentra tratando con alguna persona que esté a
cargo de los Servicios al Cliente de una empresa, pero que no logra responderle
satisfactoriamente, hágase una lista completa de lo que podría hacer ese
servicio si fuera verdaderamente muy malo.
Posiblemente, se sorprenda agradablemente al ver algunas de las cosas
que en realidad se están haciendo bien, y pueda ser más conciliador con esta
persona, o bien esté seguro de sus razones y de la falta de un buen, servicio,
lo cual se podrá expresar mucho más claramente.
2. Descarte selectivo
Para no perder el tiempo en la búsqueda de soluciones, sepa primero
cuales son las cosas que no es necesario modificar, y consecuentemente ocuparse
de ellas. Entienda cual es la verdadera causa y descarte de sus pensamientos
aquellas que no necesitan ser tomadas en cuenta
3. Haciendo lo que
nadie más hace
Por ejemplo, los japoneses introdujeron cambios trascendentales en los
relojes, al crear el reloj de cuarzo, que la industria suiza, pionera hasta ese
momento de la industria del reloj (a cuerda), jamás imaginó.
4. El método
"que pasaría si…": la mejor guía
Se debe hacer una lista de pares de acciones opuestas, que podrían ser
aplicadas al problema. Sólo se debe preguntar a su mismo "que pasaría si yo…"
y conectar esta frase con cada uno de los pares de oposiciones. Como ejemplo:
• Es personal/es general
• Se estira/se encoge
• Se congela/se derrite
• …
5. Desde otro ángulo
Cambie radicalmente la perspectiva, incluso mediante el cambio de
posición física. Aborde el problema caminando alrededor del mismo, o haciendo
alguna concepción diferente a las habituales.
6. Otro resultado
para un mismo objetivo
Si, por ejemplo, quiere aumentar las ventas, piense sobre cómo podrían
disminuir las mismas. ¿Qué tendría que hacer para que suceda esto último? El
contrario a esta respuesta podría ser la solución.
7. No hay mal que por
bien no venga…
Si algo sale mal, piense en de los aspectos positivos de la situación.
Si se reprobó un examen o salió mal una entrevista ¿Qué se sacó en positivo de
esto? ¡Que ahora ya sabe mejor como podrían desarrollarse otras situaciones
similares, y seguramente estará más preparado para las mismas!